En nuestra vida cristiana, leer la Biblia es una práctica espiritual fundamental, y sin embargo, es posible que nos dé sueño al hacerlo. Hay muchas razones por las que esto puede suceder. Algunos motivos son esperados o tienen lógica; pero hay otros que podemos ver con otra perspectiva.
Se nos ha indicado en la Biblia que al orar busquemos un lugar a solas, para que no haya interrupciones. Estar a solas, en un lugar sin distracciones, es mayormente para concentrarnos en lo que vamos a hacer, pero es algo que puede propiciar que te dé sueño leer la Biblia.
«Pero tú, cuando ores, apártate a solas, cierra la puerta detrás de ti y ora a tu Padre en privado. Entonces, tu Padre, quien todo lo ve, te recompensará.»
Mateo 6:6-13 (NTV)
Hoy día, vivimos en un estado ansioso y sentimos que es parte del vivir. La inmediatez hace que todo lo deseemos rápido. Y leer la Biblia, que muchas veces tiene capítulos complejos de entender, nos puede desanimar, frustrar o dar sueño. Los tiempos de la Biblia son pausados y un poco lentos, a diferencia de las películas, los videojuegos, los celulares con mensajes interminables con música y cambios de efectos.
ESTAS SON LAS RAZONES POR LAS QUE TE DA SUEÑO LEER LA BIBLIA
1. Es tiempo de paz espiritual
Siendo un tiempo de intimidad con Dios, buscamos de Su presencia; y para muchos es emocionante. Sin embargo, para otros, al sentir la paz de Dios, puede ser que les dé sueño leer la Biblia. Experimentan esa maravillosa paz que los relaja y les da somnolencia. Nos sentimos relajados porque estamos con nuestra confianza en Dios.
2. Tiempo de monotonía
Si haces del hecho de leer la Biblia algo mecánico y que haces a determinada hora por obligación, te puede dar sueño porque no lo disfrutas. Lo estás haciendo como una tarea que debes cumplir y sin compromiso real. Conectarte con Dios debe ser un gusto, un tiempo que disfrutas. Tiempo de acercarte más a Dios y aprender más para entonces tener una relación significativa con Él.
3. Cargas emocionales
Cuando lees ciertos pasajes de la Biblia, es posible que te den convicción o te entristezcan porque tienen que ver con el juicio, la condena o el sufrimiento. Es posible que esas emociones te carguen mentalmente y hagan que te de sueño leer la Biblia.
4. Una distracción del enemigo
El enemigo, Satanás, tiene diversas formas de tratar de controlarnos o ganarnos para él. Una es, definitivamente, alejarnos de leer la Biblia, sea porque nos dé sueño o porque nos distraiga con otros quehaceres. Debemos estar atentos y tomarlo como eso: como un ataque del enemigo que combatiremos buscando maneras de leer la Biblia sin permitir que nos gane la soñolencia. Muévete y cambia de posición. No le des el gusto a quien te quiere alejar de la Palabra de Dios. Lo hace porque lo mantiene a él alejado de ti.
«¡Estén alerta! Cuídense de su gran enemigo, el diablo, porque anda al acecho como un león rugiente, buscando a quién devorar.»
1 Pedro 5:8 (NTV)
Reconoce el valor de la Palabra de Dios
La Biblia es la Palabra de Dios. Con Su Palabra, creó todo lo que existe. Dios dijo y se hizo. Por tanto, Su Palabra es viva y activa. Además, es un privilegio poder leer la Palabra de Dios libremente. En algunos países no es permitido hacerlo. De hecho, aquí en Estados Unidos la han sacado de muchos colegios, y luego de hacerlo han entrado las armas y los sucesos terribles que hemos visto. Cuando reconoces el valor de la Palabra de ese Dios magnánimo que creó el Universo y todo lo que existe, vas a sentir sed y necesidad de leer Su Palabra y lo vas a disfrutar tanto, que ya no te dará sueño al leer la Biblia.